† EL CRISTIANITO †

TESTIMONIO PARA LA IGLESIATOMO VIII

Capítulo	Bajar
01 - Nuestra obra
02 - La gran comisión
03 - Una promesa inmutable
04 - Nuestra responsabilidad
05 - La obra dentro y fuera del país
06 - La obra en Europa
07 - Una visión del conflicto
08 - Advertencias y consejos dados a la Iglesia de Battle Creek
09 - Nuestro deber hacia el mundo
10 - La obra misionera dentro y fuera del país
11 - El Espíritu Santo en nuestras escuelas
12 - Desviados del bien
13 - Buscad la ayuda de Dios
14 - Llamamiento a los hermanos de Battle Creek
15 - Una advertencia descuidada
16 - El resultado de la reforma
17 - Una advertencia solemne
18 - El incendio de la Review and Herald
19 - Lo que pudo haber sido
20 - El olvido
21 - El valor de la prueba
22 - Concentración excesiva en Battle Creek
23 - Id por todos los lugares
24 - El propósito de Dios para sus instituciones
25 - El propósito de Dios para la obra médica misionera
26 - Una advertencia
27 - Sostened la obra médica
28 - El esfuerzo unido
29 - La oración y la bendición mediante Cristo
30 - Palabras de aliento
31 - El valor de la palabra de Dios
32 - La obra para este tiempo
33 - Una visión más amplia
34 - Cristo, nuestro ejemplo
35 - Lecciones aprendidas del pasado
36 - Cómo debe ser educada la juventud
37 - Distribución de responsabilidades
38 - La dirección de la obra
39 - Uno con Cristo en Dios
40 - El trabajo de los miembros laicos
41 - Seremos hallados faltos
42 - Dios en la naturaleza
43 - Un Dios Personal
44 - El falso y el verdadero conocimiento de Dios
45 - Peligros de la ciencia especulativa
46 - Lo falso y lo verdadero en la educación
47 - La importancia de buscar el verdadero conocimiento
48 - El conocimiento recibido a través de la palabra
49 - Nuestra gran necesidad